PLAYA PRIVADA Y
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Después de un largo viaje en auto, tren o avión todos sueñan con dejar las maletas en la habitación de un hotel decorada detalladamente, asomarse al balcón del que se puede contemplar el mar hasta donde alcanza la vista y luego bajar a pasear por una playa de arena fina.
El Hotel Sabbia d’Oro realiza sus sueños.
La posición del hotel permite a los huéspedes transcurrir sus propias vacaciones totalmente junto al mar: a las espaldas de la playa se encuentra de hecho, una terraza muy amplia, a disposición de quien quiere desayunar o almorzar al aire libre, mientras las glorietas ubicadas al final de la terraza son un oasis reparado del sol o del viento en los días calurosos de verano o en las tardes frescas de otoño.
